Cuando por primera vez abrimos la caja de nuestro móvil recién comprado, nos embarga esa sensación de estreno, de protección. Lo cierto es que tras el paso del tiempo nos preocupa menos proteger nuestro móvil y en ocasiones, sin darnos cuenta, exponemos nuestro smartphone a agentes que pueden dañarlo en gran medida.

¿Sabes cuáles son los principales enemigos de tu móvil? Hoy en el blog de Snell vamos a hablar de ellos. Sigue leyendo…

El calor

¿Te encanta el verano? Pues el calor es uno de los elementos que más puede perjudicar el funcionamiento de nuestro teléfono móvil. Y más si vives en el sur de España, donde las temperaturas superan los 40 grados.

Las altas temperaturas pueden estropear nuestro smartphone (en general, afectan a todos los equipos electrónicos). La batería es la parte más sensible, ya que sólo soporta unos 60 grados (el resto de componentes está diseñado para que aguante los 100 grados). Por supuesto, esta exposición afectará al rendimiento del teléfono. La carcasa también puede deformarse por el calor, aunque por poco dinero puede reemplazarse.

Consejos para evitar el daño por calor

• Evitar dejar el teléfono al sol. Debemos recordar que nuestro terminal ya emite calor por sí mismo, con lo que añadimos más temperatura los daños pueden ser irreparables.
• Si no puedes evitar que esté al sol, mejor apagarlo o dejarlo en casa.
• Si notas que tu teléfono está demasiado caliente, deja de usarlo. Apágalo, quita la carcasa, la batería y déjalo a la sombra en un lugar fresco y ventilado.

El frío

También la bajada de temperaturas puede hacer que nuestro móvil sufra más de lo debido. Con el frío, tu smartphone sufrirá un efecto momentáneo que no suele ser dañino.

La batería suele acortarse y disminuye su capacidad (puede perder hasta un 20% e incluso más si la temperatura sigue bajando). Por otro lado, el frío también afecta al hardware, que se ralentiza; puede congelarse el disco duro y romperse la pantalla. Es posible que también notemos menos velocidad de respuesta.

La humedad

Mucho más grave que los anteriores, ya que el agua puede oxidar los componentes internos. Además, suele ser la causa de fallos de encendido, errores de pantalla, apagado intermitente del teléfono, etc.

Consejos para evitar daños por frío y humedad

• Abriga tu dispositivo ante temperaturas frías al aire libre (con un funda o carcasa estará más protegido.
• No lo dejes en el coche, mejor en tu bolsillo, bolso o mochila. Mantén el móvil pegado a tu cuerpo el mayor tiempo posible.
• Caliéntalo un poco antes de encenderlo para no crear condensación en el interior de la pantalla.
• Las baterías de ión-litio no pueden cargarse por debajo de 0ºC. Calienta la batería antes de colocarla en el cargador. Carga la batería en una zona cuya temperatura oscile entre los 15 y 25 grados.
• En invierno utiliza los auriculares manos libres.

La lluvia, el mar o la nieve

Muchos móviles ya son capaces de aguantar la exposición al agua, pero debemos ser precavidos. Hay que secarlo según las recomendaciones del fabricante y evitar sumergirlo demasiado tiempo y a demasiada profundidad. No confundamos acuático con sumergible. Además, la mayoría de teléfonos resistentes al agua lo son al agua dulce, no al agua del mar. La sal puede corroer componentes de nuestro teléfono y dejarlo inutilizable.

Consejos para evitar daños por lluvia o nieve

• Una funda protectora de agua evita que el agua entre en contacto con nuestro dispositivo y que el agua se filtre a través de cualquier orificio.

La arena

Cuando vamos a la playa en verano con nuestro smartphone sabemos que es inevitable que entre algo de arena en el teléfono. Esta arena puede provocar un cortocircuito y obstruir el audio o el sensor fotográfico.

Consejos para evitar daños por arena

• Deja el teléfono en un sito alto (una silla o una mesa), ya que en el bolso puede sobrecalentarse.
• Dale más uso al sistema de voz para evitar tocarlo en la medida de lo posible (tus manos van a tener arena siempre).
• Usa tapones de silicona y colócalos en los orificios de carga, los auriculares o cualquier otra apertura del dispositivo.

Infecciones informáticas

Alejándonos del mundo de la meteorología, nos encontramos una de las principales amenazas para nuestro smartphone. Pueden infectarse con un software, con el uso de redes sociales, navegación por sitios inapropiados, SMS fraudulentos, etc.

Consejos para evitar daños por infecciones informáticas

• No responder ni hacer clic en mensajes sospechosos.
• Leer bien la política de privacidad antes de instalar aplicaciones.
• Verificar los permisos que requiere cada aplicación.
• Instalar sólo las apps que se necesiten.
• Evitar en la medida de lo posible WiFis públicas.
• Instalar sólo desde tiendas oficiales.
• Mantener actualizado el sistema operativo.

Ahora ya sabes Cuáles son los principales enemigos de tu móvil. Si quieres evitar la mayor parte de estos problemas y no quieres seguir los consejos que te ofrecemos en el Blog de Snell, la otra opción que tienes es practicar la desconexión y dejar tus dispositivos en casa. Así, seguro que ni se mojan ni se dañan por temperaturas extremas. Y por unos días, tampoco pasa nada. Es tu elección.